A veces nos preguntamos ¿por qué se acumula arena en el fondo de la piscina de un día para otro? La respuesta es bien sencilla y evidente, la causa más común son los vientos fuertes, que hacen que la arena o la tierra se hayan asentado en la piscina. También es probable que si hay una obra de construcción cerca, no hay duda de que el viento haya depositado el polvo en la piscina. No te preocupes, puedes resolver este problema pasando tu limpiafondos.
Somos conscientes de que una de las principales tareas de mantenimiento de una piscina es la limpieza del fondo. Ya sea con un limpiafondos manual o uno automático, hay que retirar tanto el polvo o arenilla como las hojas secas, insectos u otros sólidos que hayan podido caer al agua.
En nuestra tienda puedes encontrar varias opciones de limpiafondos:
Limpiafondos manuales. Es la opción más barata pero requiere un mayor esfuerzo físico y de tiempo. También no sirven para eliminar esas partículas muy pequeñas que no puede retener el filtro.
Limpiafondos de batería e hidráulicos. Estos son capaces de moverse en la piscina de forma autónoma. No son una buena opción para aquellos vasos con mucha pendiente ya que están diseñados para fondos con poca inclinación y planos.
Limpiadores eléctricos. Es la opción más cara y son adecuados para todo tipo de superficies, incluso pueden llegar a subir las paredes del vaso. Son bastante silenciosos y se puede programar, la limpieza es bastante más efectiva.
La limpieza del fondo se realiza cuando está sucio, aunque de forma general se recomienda realizar una limpieza al menos una vez a la semana. Además de que tu piscina muestre un aspecto limpio, ganarás en salud, ya que evitarás la formación de microorganismos que puedan contaminar o infectar el agua.
A la hora de ponernos a la tarea es muy importante saber que la válvula selectora del filtro nunca se manipula con la máquina en funcionamiento.
Vamos paso a paso:
1. Antes de empezar, conviene preparar tanto la instalación como todos los utensilios que se vayan a necesitar.En el equipo de filtración de la piscina, desconecta la corriente eléctrica. Cierra la válvula de la toma de fondo y la válvula de skimmers. Deja abierta sólo la válvula de aspiración o barredera. Asimismo, coloca la válvula selectora en posición FILTRACIÓN.
2. Coge el limpiafondos y conecta uno de los extremos de la manguera autoflotante a la toma o racor que incorpora el mismo.
3. Llena con agua la manguera autoflotante con el fin de evitar que la instalación coja aire. Una vez llena y en este orden, introduce el limpiafondos en la piscina y conecta el extremo libre de la manguera a la toma de aspiración o barredera.
4. Si el limpiafondos es automático, al conectarlo a la válvula de aspiración, éste comenzará a moverse por el fondo accionado por la propia fuerza de succión de la bomba de filtración.
Si el limpiafondos es manual, hay que ir pasándolo por toda la piscina o por las zonas que quieras aspirar. Sigue un patrón ordenado para asegurarte que se queda limpia toda la superficie del suelo. Lo habitual suele ser limpiar un lado de la piscina y luego el otro, en líneas rectas, pasando el limpiafondos lentamente para no enturbiar el agua.
Es importante tener en cuenta que si durante el proceso de limpieza del fondo observas que ha dejado de salir agua por los impulsores, o que éste no absorbe lo suficiente y al pasarlo enturbia el agua, tal vez la arena del filtro esté saturada (sucia) y tengas que realizarle un lavado. Si además has retirado muchas hojas del fondo o sólidos, es posible que necesites vaciar el prefiltro de la bomba.
5. Una vez hayas terminado de limpiar el fondo de la piscina, te aconsejamos que realices una limpieza de la arena del filtro, de esta manera se asegura que éste trabaje siempre en óptimas condiciones.
6. En caso contrario, deja la instalación en posición de FILTRACIÓN (válvula selectora en posición filtración, válvula de aspiración o barredera cerrada y válvulas de skimmers y toma de fondo abiertas).
7. Desconecta el limpiafondos de la toma de aspiración y guarda el material de limpieza en un lugar seco donde no pueda darle el sol.
Si puedes, y ya que estás en la tarea, puedes aprovechar para revisar el estado de los cestillos de los skimmers. Vacíalos en caso de que éstos estén llenos de suciedad, de esta forma el agua podrá circular sin problema. Si usas cloro en pastillas, verifica el estado de las mismas y añade en caso de necesidad. Ahora que has terminado, ¡Ya puedes disfrutar de tu piscina!