Descripción
La mejor manera de asegurar la calidad del agua de nuestra piscina, es cerciorarnos de que es idónea para nuestra salud y cumple con los parámetros que dictan las normas.
Para conocer el estado del agua de las piscinas primero debemos conocer los parámetros que rigen los indicadores de dicha calidad por lo que en HPQ PISCINAS analizaremos:
- pH: Es de vital importancia. Este parámetro es un indicador de la basicidad o acidez del agua. De él dependen las reacciones con los productos químicos utilizados para el tratamiento de la piscina. Los límites permisibles se sitúan entre 7.2-8.0 upH.
- Transparencia: La turbidez del agua nos da información de si el sistema de limpieza, cloración o filtración están actuando correctamente. Para que un agua de piscina sea de calidad ha de ser visible el desagüe del fondo perfectamente.
- Turbidez: Está relacionado con el anterior parámetro. Si el agua de piscina presenta coloración, debida a algas o a baja alcalinidad, puede conllevar al aumento de la turbidez. Este parámetro debe de ser ≤5 UNF para asegurarnos una limpidez del agua de recreo.
- Cloro: Sin duda es el parámetro más importante a tener en cuenta si se utiliza como desinfectante. En las aguas de piscina se pueden encontrar diferentes tipos de cloro.
- Cloro Libre: Su función es eliminar los microorganismos del agua de la piscina.
- Cloro libre residual: Se entiende como el cloro que queda en el agua después de que se haya acabado con toda la microbiota presente en la misma. Sus valores deben de estar entre 0.5-2 mg/l Cloro. La ausencia o la superación de ese límite conlleva el cierre del vaso.
- Cloro combinado residual: Resulta de la combinación del cloro libre con otras sustancias no patógenas presentes en el agua. Es el causante de la irritación de ojos, malos olores etc. Su límite se sitúa en 0.6 mg/l Cloro.
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